viernes, 22 de febrero de 2013

la bicicleta electrica

Hace tiempo que están aquí y ya no nos sorprende verlas circular por las principales ciudades europeas. Las ventas de bicis eléctricas, o mejor dicho, de bicicletas de pedaleo asistido (PAS), crecen de año en año.
Esta denominación es la correcta, ya que no se trata exactamente de una bicicleta dotada de un motor eléctrico al uso. En este caso tendrían otro nombre. A saber: bicicleta + motor = ciclomotor. En una bicicleta eléctrica,el motor se pone en funcionamiento solamente cuando se pedalea, es decir, trabaja para sumar su esfuerzo al del ciclista. En cuanto se deja de pedalear, se desactiva. Esto es necesario desde un punto de vista legal para que puedan ser utilizadas sin ningún tipo de permiso y no entren en el territorio de las motocicletas.
La bici eléctrica es una magnífica alternativa de transporte urbano
Las características de estas bicis son:
  • como ya hemos visto, el motor es una asistencia al pedaleo, por lo tanto no tienen acelerador;
  • tiene un máximo de 250 W de potencia y se desconecta automáticamente al alcanzar la velocidad de 25 Km/h.
Los componentes añadidos a la bici tradicional son: el motor, una batería recargable, un receptor de la pedalada, un controlador que trabaja en función de la información que le llega del receptor y un indicador que informa al menos de la cantidad de carga de la batería.
El motor se suele alojar en el buje delantero o trasero, pero también puede estar en el pedalier.
La batería es el elemento clave de la bici. La autonomía, la duración de la carga, depende obviamente del tipo de terreno y del ciclista, así como del tipo de batería, pero para hacernos una idea se sitúa entre los 20 y los 70 km, llegando incluso a los 100.

Batería sobre el trasportín
La vida útil está entre las 350 y las 1.000 recargas.
Los diferentes tipos son:
  • Baterías de plomo (Pb). Son las más baratas pero también las más pesadas, con mucha diferencia. Sin embargo no tienen efecto memoria. Acusan más el frío. Se pueden inclinar pero no invertir. Vida útil: unas 500 recargas.
  • Baterías Niquel-Cadmio (Ni-Cd). Más ligeras y también más caras. Tienen efecto memoria (se han de descargar completamente antes de recargarlas). Casi en desuso, están siendo remplazadas por las de Litio. Vida útil: de 500 recargas (pérdida del 20%) a 1.000 (pérdida del 40%); de 3 a 4 años dependiendo del uso.
  • Baterías de Ni-Mh. Parecidas a las de Ni-Cd pero acumulan más potencia a igualdad de volumen. Además no contienen cadmio, que es un metal pesado. Sufren menos el efecto memoria. Son más caras. Vida útil: de 500 recargas (pérdida del 20%) a 1.000 (pérdida del 40%).
  • Baterías de Litio (Li-ión o Li-Polímero). Las más avanzadas y usadas actualmente. Tienen la mejor relación peso/potencia, gran flexibilidad de uso, no tienen efecto memoria y poseen gran potencia instantánea. El precio es su punto débil. Vida útil: de 500 a 1.000 recargas (Li-Ion); de 3 a 5 años, dependiendo del uso.
¿Cómo funciona una bicicleta eléctrica?
Es bien sencillo. Con una llave de contacto se pone en funcionamiento el sistema. El motor se activa con el pedaleo y su asistencia varía automáticamente en función de la velocidad. Normalmente es más importante en el arranque, cuando más falta hace, y va disminuyendo con la velocidad, donde la inercia, al menos en terreno llano, no la hace casi necesaria, hasta el punto de detenerse al sobrepasar los 25 km/h. Como hemos dicho, tendremos asistencia de motor durante 20 a 70 km. Una vez agotada la batería, la bicicleta funcionará como una bici normal. Dependiendo del modelo, los sistemas son más o menos complejos y regulables. El motor tiene interés fundamentalmente, en el arranque, las cuestas, recorridos con viento de cara o transporte de peso. Con estas bicis se pedalea igual, pero con mucho menor esfuerzo.
Ventajas de la bicicleta eléctrica:
  • superar cuestas y viento de cara con mucho menos esfuerzo.
  • permitir desplazamientos al trabajo sin llegar empapados en sudor
  • permitir desplazamientos cotidianos de mayor distancia.
  • hacer la bici accesible a todo el mundo, sin importar la edad o la condición física.
Desventajas:
  • el peso a la hora de transportarla. Sin embargo, este peso extra que añade el sistema PAS, que va de los 6 a los 20 kg, no se notará durante el pedaleo mientras dure la batería;
  • obligación de recargar la batería y sustituirla al final de su vida útil;
  • se hace menos ejercicio que en la bici normal
  • el precio, mucho más elevado. Sin embargo, si se usa en sustitución del coche o el transporte urbano para desplazamientos cotidianos la acabaremos amortizando;
  • conviene protegerlas con un buen antirrobo
  • Además de un uso eminentemente urbano, estas bicis también pueden ser adecuadas para paseos dominicales, especialmente para personas a las que no les gusta el deporte o con algún problema de salud.
Motorización de nuestra bici
Para los que estén interesados en tener una pero no quieran gastarse una pasta en comprarla, existe la posibilidad de motorizar una bici normal mediante los kits de diversas marcas que hay a la venta y que incluyen: el motor, la batería , el sistema de control y el cableado. Estos kits son, no obstante, pero en todo caso cuestan menos que una nueva, permiten que sigamos utilizando nuestra querida bici de siempre y será seguramente más ligera que una eléctrica de precio medio.

Se venden kits para motorizar nuestra bici de fácil instalación
Respecto al futuro de la bici eléctrica, si bien sus ventas aumentarán durante mucho tiempo.
Sus potenciales usuarios se sitúan más en un público que busca un medio de transporte práctico, rápido y barato, sin interesarles demasiado la bici como elemento lúdico además de como medio de transporte, o en personas de cierta edad o con una condición física que no les permite sus desplamientos cotidianos cómodamente en una bici normal.
La bici eléctrica les dará la posibilidad de desplazarse más rápido que en coche a poco tráfico que haya.
Así pues, la bici eléctrica es una alternativa real al transporte motorizado humeante, brutalizador y caro del automóvil; es un miembro más de la familia bicicletil que contribuye a incrementar la masa crítica de ciclistas que tanta falta hace en nuestras ciudades.