En primer lugar tenemos el kit con el cepillo de nylon y el limpiador para piñón. Ambos tienen el grosor adecuado para introducirse sin problemas entre los piñones y así acceder fácilmente a su parte más recóndita, a la que no podremos llegar con los “útiles de supermercado”.
Una vez que tenemos limpios piñones y platos, llega el turno de “asear” nuestra cadena. No nos volvamos locos con “inventos”, que para eso están limpiadores de cadena como este modelo Chain Cleaner de PRO. Este tipo de útiles necesita la ayuda de un líquido desengrasante. PRO nos incluye en el set una muestra de 75 ml de su producto específico para bicicleta, que no daña el aluminio y es biodegradable, además de tener un olor cítrico muy agradable. El limpiador cuenta con un conjunto de cepillos y ruedas dentadas que, a modo de "mini-tren de lavado”, frota y limpia la cadena por todas sus partes, tanto por ambos lados, como por arriba, por abajo y el espacio entre eslabones. En definitiva, unos útiles altamente recomendables para cualquier usuario de bicicleta. Y que por muy poco dinero nos ayudarán a realizar correctamente una tarea muy habitual, manteniendo nuestra transmisión en mejor estado durante más tiempo. El set de cepillos tiene un PVP de 6,50 euros y el limpiador de cadena se encuentra a la venta por 24,00 euros.
